El tiempo pasa, pero no igual para todos.

Es curioso cómo me he dado cuenta de que el tiempo ha pasado.
Las tardes después del instituto con toda la pandilla, los entrenos en la piscina, las vacaciones del colegio, ... todo eso ya no es igual.
El 98% de mis amistades y conocidos están "colocaos".
- El/la que no está casad@, vive con su pareja.
- El/la que no está casad@ o vive en pareja tiene descendencia.
- El/la que no está casad@ y/o tiene descendencia, se ha divorciado.

Y sólo quedamos dos solteros en la pandilla, en todos mis círculos de amistades sólo quedamos dos sin colocar.

Me siento DESCOLGADA del pelotón ciclista de la vida.
Y ahora te metes en el "feibú", "mesinller","tuenti" y te encuentras fotos de boda, bautizos, fotos de bebés, fotos de casas,....

Y que no se te ocurra tener antojo de salir de fiesta porque... estás más sólo que el cobra.
La vida marital, la maternidad, impiden una noche de risas y bailes en la que tod@s tengan disponibilidad.
Así que mi vida social se reduce a:
- pequeñas escapadas con las niñas, mientras sus maridos/novios se quedan con los churumbeles (o solos, según sean padres o no). En estas escapadas cenamos y tomamos una copa, UNA, en un bar y.... PA´CASA.
- cafés apurados en cualquier terraza/cafetería que nos pille cerca de donde se producen los encuentros (muchas veces encuentros fortuitos porque ya no viven con sus padres y no sabes dónde localizarles).
- cenas/comidas/meriendas en sus casas de gente mayor (yo me sigo sintiendo una enana). Con sus supermuebles, decoración, paredes de mil colores,.....

Pero lo mejor de todo, es que nos basta un cruce de miradas fortuito por cualquier calle/comercio, para girarnos bruscamente y abrazarnos y besarnos con el mismo cariño que hace años cuando quedábamos tooooodos los sábados para salir.
Seremos madres/padres, esposas/maridos pero.. la amistad sigue ahí y que sepáis que me hacéis sentir una niña muy afortunada por contar con vuestra amistad.